viernes, 16 de septiembre de 2011

Congreso: Demagogia y Víctimización

El pasado 14 de septiembre de 2011 el Representante a la Cámara, Telésforo Pedraza, dijo que es posible que el Estado tenga que declararse en quiebra por el pago de sentencias en su contra. (Ver artículo). Según las cifras del Congresista, a julio de 2011, existen 27.243 demandas con pretensiones por 23 billones de pesos.

En seguida explicó que en 2010 se pagaron 233 mil millones de pesos, mientras que a julio de 2011 se han pagado 133 mil millones. Bueno, hagamos cuentas.

El Estado saca de su presupuesto más de 24 millones de pesos mensuales para el pago de salarios y prestaciones de un congresista. Nuestro Congreso de la República tiene, en total, 267 padres de la Patria. Eso significa que, también a julio de 2011, se pagaron sólo por concepto de salarios a los congresistas la suma de 57.672 millones de pesos.

Cada congresista tiene derecho a un grupo de apoyo que se llama Unidad de Trabajo Legislativo (UTL), que tiene como presupuesto mensual para su funcionamiento, 50 salarios mínimos. Es decir; si tenemos que, por cada legislador hay una Unidad de Trabajo Legislativo y para cada una de ellas se destinan 50 salarios mínimos ($535.600), tenemos que a Julio de 2011, se debieron pagar 50.518 mil millones de pesos.

Sin contar Secretaría General, secretarías de comisiones, ni los asesores de esas mismas secretarías, ni el pago de auxilares de servicios generales, ni servicios públicos, ni el pago de las pensiones a cargo del Fondo de Previsión del Congreso, a julio de 2011 el Estado pagó algo más de 108 mil millones de pesos para el funcionamiento del Congreso.

En conclusión, si a julio de 2011 se han pagado 133 mil millones de pesos para soliviantar las necesidades que deja la guerra a padres, madres, esposas, huérfanos; para indemnizar a personas que resultan víctimas de negligencias y descuidos del Estado, etc.,mientras que se pagaron más de 100 mil millones para que funcione el cuerpo legislativo, ¿Por qué no decimos los ciudadanos que hay probabilidad de que el Estado tenga que declararse en quiebra por el funcionamiento del Congreso de la República?

Seguramente no se fija el Dr. Telésforo Pedraza que, según sus propios cálculos, el sólo funcionamiento del Congreso de la República le cuesta al Estado quizá algo más de lo que cuesta reparar a las personas que han sufrido algún daño antijurídico causado por la acción u omisión de las autoridades públicas.

Otra cosa. El Presidente del Congreso, Juan Manuel Corzo, dijo ayer 15 de septiembre de 2011 que su sueldo no le alcanza para la gasolina de sus carros.